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Editorial Claretiana se complace en presentar el libro Con corazón de madre. Coloquios con Mama Antula, de Mons. Ernesto Giobando, sj. Un libro esencial para conocer la vida y obra de María Antonia de Paz y Figueroa, la primera santa argentina. La Obra, además, tiene como prologuista al cardenal Ángel Rossi, sj., quien introduce exquisitamente a los lectores en la intención primera del autor:

Me hace bien imaginar este diálogo de Ernesto con Mama Antula. Me los imagino sentaditos en uno de los bancos del patio de la Santa Casa, a la sombra del árbol, mateando, y sin tiempo, sin una agenda que los embrete, que es condición para esas conversaciones lindas, esos coloquios hondos.

Efectivamente, Mons. Giobando elige la composición literaria del coloquio para bucear por la vida de María Antonia de Paz y FigueroaMama Antula—, como la llamaban sus paisanos en señal de cariño y reconocimiento. Basándose en documentos históricos recorre, desde una imaginaria y cálida charla de amigos, —“como un amigo habla a otro”— la vida de la Santa; sus opciones, su aceptación para todos sin discriminar a nadie, y su coraje como mujer de su tiempo, especialmente después de la expulsión de los jesuitas, en el año 1767, donde decide no dejar morir la obra de los Ejercicios Espirituales.

En el capítulo VI, Monseñor rescata en tres puntos esenciales el testimonio de vida de una persona sencilla de fe que, desde un contexto de época poco favorable para la mujer y con pocas opciones, tiene la fortaleza de ponerse de pie y salir a los caminos, segura del tesoro heredado por los jesuitas, y abrazando a todos por igual. Sin duda, forma parte de este grupo de mujeres del Virreinato que deciden romper con los estereotipos de aquella época “metiendo los pies en el barro”.  Para eso nada mejor que la propia afirmación de Mons. Giobando: “si hubo una mujer del siglo XVIII que hizo ‘lío en las diócesis’ esa mujer fue sin duda Mama Antula”. Además, en la obra se encuentra publicado en su totalidad el Testamento de doña María Antonia de San José, dictado por ella el 6 de marzo de 1799, un día antes de su muerte.

Una obra profética, que interpela y nos brinda el testimonio de esta verdadera “apóstol”, incansable que, descalza, sale a las periferias de la vida, impulsada por el Espíritu de Dios y apasionada por los Ejercicios Espirituales.

Mons. Ernesto Giobando, sj, nació en la ciudad de Santa Fe, el 13 de diciembre de 1959. Realizó sus estudios secundarios en el Colegio de la Inmaculada Concepción de los jesuitas.  A los quince años, conoció a Jorge Bergoglio, sj (futuro papa Francisco), el cual sería su profesor y a quien le manifestara reiteradas veces sus deseos de ingresar en la Compañía de Jesús. Finalmente, el 7 de diciembre de 1978, ingresó en la Orden y fue ordenado sacerdote de la misma el 17 de noviembre de 1990 en el Colegio Máximo, por Mons. José Manuel Lorenzo, obispo de San Miguel. El 5 de marzo de 2014 fue elegido por el papa Francisco obispo titular de Appiaria y obispo auxiliar de Buenos Aires; fue ordenado el 3 de mayo de 2014 en la catedral de Buenos Aires por el Card. Mario Aurelio Poli, arzobispo de Buenos Aires. En la Conferencia Episcopal es miembro de la comisión Apostolado de los Laicos y Pastoral Familiar. En la arquidiócesis de Buenos Aires es el vicario episcopal de la zona Flores, y Vicario Episcopal para la Educación. Además, es el principal postulador de la causa de canonización de Mama Antula. Fue Giobando quien le acercó la imagen de ella a la familia de Claudio Perusini quien estaba internado en coma en el Cullen, y cuya recuperación es el milagro que lleva a los altares a la Santa. Recientemente Mons. Giobando fue nombrado por el Papa administrador apostólico de la diócesis de Mar del Plata.

 

Indice:

Con corazón de madre. Coloquios con Mama Antula

Con corazón de madre. Coloquios con Mama Antula

Editorial Claretiana se complace en presentar el libro Con corazón de madre. Coloquios con Mama Antula, de Mons. Ernesto Giobando, sj. Un libro esencial para conocer la vida y obra de María Antonia de Paz y Figueroa, la primera santa argentina. La Obra, además, tiene como prologuista al cardenal Ángel Rossi, sj., quien introduce exquisitamente a los lectores en la intención primera del autor:

Me hace bien imaginar este diálogo de Ernesto con Mama Antula. Me los imagino sentaditos en uno de los bancos del patio de la Santa Casa, a la sombra del árbol, mateando, y sin tiempo, sin una agenda que los embrete, que es condición para esas conversaciones lindas, esos coloquios hondos.

Efectivamente, Mons. Giobando elige la composición literaria del coloquio para bucear por la vida de María Antonia de Paz y FigueroaMama Antula—, como la llamaban sus paisanos en señal de cariño y reconocimiento. Basándose en documentos históricos recorre, desde una imaginaria y cálida charla de amigos, —“como un amigo habla a otro”— la vida de la Santa; sus opciones, su aceptación para todos sin discriminar a nadie, y su coraje como mujer de su tiempo, especialmente después de la expulsión de los jesuitas, en el año 1767, donde decide no dejar morir la obra de los Ejercicios Espirituales.

En el capítulo VI, Monseñor rescata en tres puntos esenciales el testimonio de vida de una persona sencilla de fe que, desde un contexto de época poco favorable para la mujer y con pocas opciones, tiene la fortaleza de ponerse de pie y salir a los caminos, segura del tesoro heredado por los jesuitas, y abrazando a todos por igual. Sin duda, forma parte de este grupo de mujeres del Virreinato que deciden romper con los estereotipos de aquella época “metiendo los pies en el barro”.  Para eso nada mejor que la propia afirmación de Mons. Giobando: “si hubo una mujer del siglo XVIII que hizo ‘lío en las diócesis’ esa mujer fue sin duda Mama Antula”. Además, en la obra se encuentra publicado en su totalidad el Testamento de doña María Antonia de San José, dictado por ella el 6 de marzo de 1799, un día antes de su muerte.

Una obra profética, que interpela y nos brinda el testimonio de esta verdadera “apóstol”, incansable que, descalza, sale a las periferias de la vida, impulsada por el Espíritu de Dios y apasionada por los Ejercicios Espirituales.

Mons. Ernesto Giobando, sj, nació en la ciudad de Santa Fe, el 13 de diciembre de 1959. Realizó sus estudios secundarios en el Colegio de la Inmaculada Concepción de los jesuitas.  A los quince años, conoció a Jorge Bergoglio, sj (futuro papa Francisco), el cual sería su profesor y a quien le manifestara reiteradas veces sus deseos de ingresar en la Compañía de Jesús. Finalmente, el 7 de diciembre de 1978, ingresó en la Orden y fue ordenado sacerdote de la misma el 17 de noviembre de 1990 en el Colegio Máximo, por Mons. José Manuel Lorenzo, obispo de San Miguel. El 5 de marzo de 2014 fue elegido por el papa Francisco obispo titular de Appiaria y obispo auxiliar de Buenos Aires; fue ordenado el 3 de mayo de 2014 en la catedral de Buenos Aires por el Card. Mario Aurelio Poli, arzobispo de Buenos Aires. En la Conferencia Episcopal es miembro de la comisión Apostolado de los Laicos y Pastoral Familiar. En la arquidiócesis de Buenos Aires es el vicario episcopal de la zona Flores, y Vicario Episcopal para la Educación. Además, es el principal postulador de la causa de canonización de Mama Antula. Fue Giobando quien le acercó la imagen de ella a la familia de Claudio Perusini quien estaba internado en coma en el Cullen, y cuya recuperación es el milagro que lleva a los altares a la Santa. Recientemente Mons. Giobando fue nombrado por el Papa administrador apostólico de la diócesis de Mar del Plata.

 

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