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Este libro recoge la vida, escritos y testimonios de la hermana Cecilia María de la Santa Faz, una joven carmelita descalza cuya existencia fue signo luminoso de entrega total a la voluntad de Dios. Su vocación, nacida en San Martín de los Andes y madurada en la oración y el servicio, encontró su plenitud en el Carmelo de Santa Fe.

Marcada por una fe ardiente y una ternura desarmante, supo abrazar con serenidad el dolor cuando le fue diagnosticado un cáncer terminal. “El Señor eligió por mí y yo dije: FIAT”, escribió con mansedumbre y firmeza.

A través de cartas, recuerdos y reflexiones, las Hermanas Carmelitas de su comunidad nos ofrecen una ventana íntima a su humanidad frágil y santa, revelando un camino posible de santidad en lo cotidiano, desde la ternura y la entrega confiada. Un testimonio conmovedor que invita a vivir la fe con autenticidad, profundidad y esperanza.

 

El Monasterio de Carmelitas Descalzas de la Ciudad de Santa Fe, Argentina, dedicado a la oración por la Iglesia y el mundo fue fundado en 1939, por hermanas de los Carmelos de La Plata y Rosario. La inspiración la recibió la viuda Rosario Palacios que donó la casa y posteriormente ingresó a sus 48 años, muriendo santamente. Hubo otras raíces de santidad en hermanas que edificaron la Comunidad con sus vidas entregadas de las cuales se nutrió nuestra hermana Cecilia María de la Santa Faz.

Hermana Cecilia María de la Santa Faz

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Este libro recoge la vida, escritos y testimonios de la hermana Cecilia María de la Santa Faz, una joven carmelita descalza cuya existencia fue signo luminoso de entrega total a la voluntad de Dios. Su vocación, nacida en San Martín de los Andes y madurada en la oración y el servicio, encontró su plenitud en el Carmelo de Santa Fe.

Marcada por una fe ardiente y una ternura desarmante, supo abrazar con serenidad el dolor cuando le fue diagnosticado un cáncer terminal. “El Señor eligió por mí y yo dije: FIAT”, escribió con mansedumbre y firmeza.

A través de cartas, recuerdos y reflexiones, las Hermanas Carmelitas de su comunidad nos ofrecen una ventana íntima a su humanidad frágil y santa, revelando un camino posible de santidad en lo cotidiano, desde la ternura y la entrega confiada. Un testimonio conmovedor que invita a vivir la fe con autenticidad, profundidad y esperanza.

 

El Monasterio de Carmelitas Descalzas de la Ciudad de Santa Fe, Argentina, dedicado a la oración por la Iglesia y el mundo fue fundado en 1939, por hermanas de los Carmelos de La Plata y Rosario. La inspiración la recibió la viuda Rosario Palacios que donó la casa y posteriormente ingresó a sus 48 años, muriendo santamente. Hubo otras raíces de santidad en hermanas que edificaron la Comunidad con sus vidas entregadas de las cuales se nutrió nuestra hermana Cecilia María de la Santa Faz.